No hace falta ser Ingeniero Agronomo para tal proeza. Adrián, el nieto de Antonia tiene un porvenir asegurado en la agricultura, pero el tiempo nos dira lo que tenga que ser.
Adrián vertiendo minusiosamente el agua para que la planta crezca.
Adrián asesorando a su abuela, como sujetar El chopo.
A los pocos días el chopo brota (no es un milagro, sino el don de la agricultura que tiene Adrián)
Vaya con Adrían...es todo un experto en el arte de plantar chopos cabeceros, con un ingeniero de montes así España volverá a tener muchissssiiimos más árboles.
ResponderEliminar¡¡¡Bien campeón!!!
¡ Vaya, vaya con Antonia ! ¡Con que te lo regalaron, eh ! Menos mal que Adrián tiene vena ecológica y se dedica a enmendar los desmanes de su abuela….. Lo que me temo es que a un chico tan guapo (en eso si ha salido a ti, Antonia) cuando crezca se lo coman antes de terminar la carrera… ¡Menudas son ahora las chicas !
ResponderEliminarEn vista de lo exitoso del proceso de conseguir brotes verdes, paténtalo, y véndeselo a los políticos, que nos va a hacer falta.
Un beso para Adrian….y para la abuela.